Pidió que se abandone la lógica del más fuerte y que se abra paso la lógica de la solidaridad.
El Papa agradeció su paciencia y les pidió hacer del trabajo cada vez un lugar más digno.
Su felicitación de Navidad a los jefes de dicasterio tuvo un sabor especial porque este fue el año en el que se culminó la nueva constitución apostólica.
Francisco concluyó el mes visitando en el norte de Italia a una prima que cumplía 90 años.