En estos momentos difíciles, Konrad Krajewski, el “limosnero del Papa”, ha puesto a disposición el número personal.
Visitó dos comunidades religiosas que están en cuarentena, luego de que muchas de sus monjas dieron positivo al coronavirus.
De parte del Papa, les ha pedido que sigan ayudando a las personas con valentía y esperanza.
El purpurado ha salido de la cárcel.