La defensa del cardenal sostiene que hubo irregularidades en el proceso y que Pell fue condenado sin que hubiera pruebas ni evidencias.
Abarca desde el 6 de abril de 2019 hasta el 31 de mayo de 2020.
Devolvió irregularmente la corriente eléctrica a más de 400 personas sin recursos. Asegura que está dispuesto a pagar las consecuencias.
Tuvo que dirigir la comunidad de Líbano en los últimos compases de la guerra civil y la posguerra.