Algunos asesinatos responden a violencia yihadista. Otros buscan desestabilizar una región.
El padre Roger Kogolo es sacerdote en una de las diócesis más afectadas por los ataques yihadistas y de milicias criminales.
En el país de más de 1.300 millones de habitantes, los cristianos son poco más del 2 %.
El informe anual de Open Doors refleja que la persecución contra los cristianos aumenta.