Fue acusado de haber tocado de forma inapropiada a una becaria cuando era arzobispo de Quebec.
El obispo llevaba dos semanas detenido sin poder salir del Palacio Episcopal.
Varias órdenes de la familia franciscana llevan décadas trabajando en una cuestión delicada.
El madrugón mereció la pena: su bebé recién nacido recibió una bendición sorpresa del Papa Francisco.