El Papa participó en la ceremonia en actitud de especial recogimiento.
Son voluntarios en la comunidad de Santa Sofía, la iglesia de los ucranianos en Roma.
La embajadora le regaló al Papa una estola elaborada al estilo de las culturas locales de Bolivia. Francisco se la intentó poner, pero tuvo dificultades al estar en una silla de ruedas, y la embajadora le ayudó.
La escultura fue bendecida por Vincenzo Paglia, Presidente de la Pontifica Academia para la Vida.