Hace pocos días, hablando sobre la división que provocan quienes se aferran a tradiciones litúrgicas, el Papa volvió a hablar de la presencia del diablo.
Lo acusan de estar involucrado en Fondo 612, una entidad que recaudaba dinero para pagar los gastos legales de las personas arrestadas en las manifestaciones de 2019.
Sus maridos forman parte del famoso regimiento Azov, el que está atrincherado en los túneles de la acería Azovstal.
La grave crisis económica y social han desatado graves disturbios en el país.