El Pontífice ha rezado por la paz y ha recordado las consecuencias de la guerra de Ucrania al final de la audiencia general del miércoles.
Aún así el Papa no quitó ni un minuto de tiempo a saludar a los peregrinos presentes.
La Audiencia General de los miércoles es la ocasión para que muchos creyentes intenten hacerle llegar un regalo al Pontífice. Nicholas Kemdi viene de Atlanta (EEUU) para entregarle un rosario hecho por su hijo Dowm.
Está usando el bastón para desplazamientos cortos, y esta mañana tuvo que desplazarse desde el papamóvil hasta la silla desde donde pronunció la catequesis pública.