Son los pocos cristianos que quedan en Irak y sienten el peso de la responsabilidad. ¿Si ellos no viven su fe con obras quién lo hará? ¿Y quién cuidará del patrimonio cristiano en Irak?
“Vemos que hay muchos musulmanes empobrecidos, más que nosotros los cristianos. Tenemos que mostrar la misericordia de Jesús también a ellos”, dice el padre Aram Pano, cofundador de “El Buen Samaritano”.
Ha sido el atentado más sangriento en Bagdad en los últimos seis meses.
El país sigue atravesando un delicado momento político y económico.