Francisco invitó a los participantes a encontrar nuevos santos en las personas que les rodean.
Gracias a sus ahorros y lo recaudado con su obra literaria “Amen sin tilde”, desde hace unas semanas Javier es dueño de un pequeño piso. Hospedará a dos personas en riesgo de exclusión.
La clínica Birth Choice reconoce que aún queda mucho por hacer en favor de la vida a pesar de que hace tres meses el Tribunal Supremo de EEUU revocara el derecho constitucional al aborto.
Los jesuitas piensan en profundizar su obra social: “No nos vamos de Tarahumara”.