El Papa en uno de sus discursos había hecho precisamente referencia a ese instrumento.
Se colocará en el santuario que está en Ozernoe, a 400 kilómetros de la capital.
Al ser la fiesta de la Exaltación de la Cruz, reflexionó sobre el sentido del sufrimiento y recordó a católicos kazajos los sufrimientos de la persecución soviética.
Se esperaba que Kirill y Francisco se reunieran en este Congreso, pero el patriarca decidió no viajar.