Ha sido durante un encuentro con alumnos del Seminario Lombardo.
Abordó cuestiones personales, el futuro de la Iglesia, y los desafíos del medio ambiente y la guerra.
El presidente esloveno regaló al Papa un dulce típico y colmenas pintadas.
El Papa estaba conmovido por dos gestos de humanidad, uno en Italia y otro en Marruecos.